El cuerpo coloreado es una solución técnica que une resistencia, durabilidad y diseño, minimizando imperfecciones visibles en zonas de alto tránsito.
Hay decisiones técnicas que, aunque discretas, pueden marcar toda la diferencia en el resultado de un proyecto. Y en arquitectura, donde cada material habla, elegir superficies que resistan el paso del tiempo, sin sacrificar su apariencia, es parte del oficio.
En ese sentido, el porcelanato de cuerpo coloreado es mucho más que una elección estética: es una solución pensada para responder con elegancia a las exigencias de los espacios contemporáneos. Se trata de una tecnología que, aunque imperceptible a primera vista, aporta una serie de beneficios técnicos que elevan la funcionalidad del diseño y ofrecen mayor tranquilidad en el día a día.
¿Qué es el cuerpo coloreado?
Es una tecnología que asegura que el color visible en la superficie del porcelanato se mantenga a lo largo de todo su espesor. Es decir, el tono del cuerpo interior del material es el mismo o muy cercano al color predominante del diseño exterior.
La principal ventaja: si llegara a existir una astilladura, rayón o corte, el daño será visualmente mínimo. No hay un contraste brusco entre el acabado superior y el cuerpo interior, lo cual garantiza una apariencia mucho más homogénea y limpia con el tiempo.
Resistencia que permanece.
En espacios de alto tránsito, tanto residenciales como comerciales, el desgaste superficial de los pisos es inevitable. Pero con cuerpo coloreado, esa erosión no compromete la estética del proyecto. La continuidad del tono permite que incluso zonas muy expuestas, como entradas, pasillos o escaleras, mantengan su apariencia original durante años.
Además, al tratarse de un porcelanato de alta densidad cocido a temperaturas elevadas, su resistencia al impacto y al rayado lo convierte en una opción ideal para entornos exigentes. Desde aeropuertos hasta terrazas exteriores, el cuerpo coloreado ofrece una tranquilidad técnica sin renunciar al diseño.
Ventajas funcionales que se ven y se sienten.
Más allá de lo estructural, esta tecnología responde a una necesidad cada vez más presente en los proyectos arquitectónicos: mantener la estética con el paso del tiempo.
Algunas de sus ventajas clave son:
- Apariencia uniforme: el cuerpo coloreado ayuda a mantener la homogeneidad visual incluso en situaciones de desgaste, cortes o ajustes.
- Durabilidad superior: al minimizar la visibilidad de imperfecciones, se prolonga la vida útil del material sin comprometer la imagen del espacio.
- Menor mantenimiento estético: al reducir los contrastes por daños superficiales, disminuye la necesidad de reemplazo o reparación por cuestiones visuales.
- Adaptabilidad: se puede instalar en interiores y exteriores, zonas húmedas o de alto tráfico, con la confianza de que el material responderá.
Aplicaciones que requieren algo más
Hoy en día, los materiales deben cumplir múltiples funciones. No basta con que luzcan bien: deben ser versátiles, eficientes, y sostener la narrativa de un diseño bien pensado.
El porcelanato de cuerpo coloreado es especialmente útil en:
- Zonas comerciales: tiendas, hoteles o espacios de alto tránsito que requieren durabilidad sin perder estilo.
- Terrazas y exteriores: al combinarlo con tecnologías como Non Slip, ofrece seguridad y resistencia ante condiciones climáticas cambiantes.
- Cocinas y baños: donde el desgaste, la humedad y los posibles impactos son frecuentes.
- Fachadas ventiladas o revestimientos: su tono uniforme permite cortes limpios y detalles precisos en acabados verticales.
Dos soluciones con cuerpo coloreado que marcan la diferencia
Levant es una de esas colecciones que hablan el idioma de la precisión. Su cuerpo coloreado asegura una estética continua incluso ante fisuras o quiebres, mientras que su tecnología Non Slip lo vuelve ideal para exteriores, zonas húmedas o espacios con necesidades específicas de seguridad. Una solución de alto desempeño con visión de largo plazo.
Por su parte, Unique Ground lleva esta tecnología a otro nivel: combinando cuerpo coloreado con resistencia extrema, se convierte en un aliado natural para proyectos de gran escala y alto flujo, como terminales, centros comerciales o espacios públicos. Inspirado en el terrazo, logra unir sofisticación visual con desempeño técnico.
Ambos productos demuestran que la tecnología aplicada a superficies no es un lujo, sino una estrategia para diseñar mejor.
Cuando lo técnico también es diseño
En la práctica arquitectónica, los materiales que solucionan sin exigir atención son los que mejor cumplen su función. El porcelanato de cuerpo coloreado representa esa clase de avances que no necesitan protagonismo, pero que transforman por completo la experiencia del espacio.
Y si a eso se le suma un portafolio disponible, un equipo de respaldo local, y entregas ágiles desde una planta cercana, se entiende por qué esta tecnología ya no es solo una opción: es una herramienta esencial para diseñar con inteligencia, precisión y visión a futuro.
